Empleo el coaching en las clases de dibujo, arte y diseño tanto presenciales como online en directo para mejorar los resultados. La palabra coaching es un anglicismo que proviene del verbo inglés “to coach” que significa entrenar y se puede definir de las siguientes maneras:
–       Según la Federación Internacional de Coaching es la relación profesional continuada que ayuda a que las personas produzcan resultados extraordinarios en sus vidas, carreras, negocios u organizaciones ahondando en su aprendizaje, mejorando el desempeño y reforzando su calidad de vida.
–       Según Gallwey (2012) es el acompañamiento a una persona a partir de sus necesidades profesionales para el desarrollo de su potencial y de su saber hacer.
–       Según Whitmore (2003) consiste en liberar el potencial de una persona para incrementar al máximo su desempeño, ayudándole a aprender en lugar de enseñarle.
–       Según Miedaner (2002) cubre el vacío existente entre lo que eres ahora y lo que deseas ser.

La persona que instruye el proceso de coaching se llama “coach” y la que lo recibe se denomina “coachee”. Según Scheele (2012) surgió en EEUU en torno a los años ochenta del siglo XX y bebe de las siguientes fuentes:
–       De la filosofía, desde Sócrates y el arte de la Mayéutica hasta la filosofía existencialista y fenomenología alemana de Nietzsche, Heidegger o Wittgestein, pasando por autores como Ken Wilber o la Ontología del lenguaje de Rafael Echevarria.
–       De la psicología, incluyendo el psicoanálisis de sigmund Freud, el humanismo de Carl Rogers, la Gestalt de Fritz Perls, la logoterapia de Victor Franki, la psicoterapia cognitiva de Albers Ellis, La escuela de Palo alto de Paul Watzlawick y de otros a autores como Maslow, Eric From, Jean Piaget, Gregory Bateson, etc.
–       De la nuevas ideas de liderazgo y management procedente de autores como Stephen Covey, Peter Senge, Daniel Goleman, Tom Peters, etc.
–       De la física cuántica de autores como David Bohn y Friotj Capra.
–       De la biología del conocimiento de Humberto Maturana y de Francisco Varela.
–       De la lingüistica de John L. Austin y John Searle
–       De la Teoría de los Sistemas de Heinz Von Forest y Peter Senge.
Para emprender el proceso de coaching es importante empezar aplicando los procedimientos y las herramientas del mismo a nivel personal, lo que se denomina autocoaching, para luego poder compartirlas y establecer una buena relación con el coachee. Para ello esta relación ha de basarse en:
–       La confidencialidad, de manera que el coachee se sienta seguro y tranquilo para poderse expresar libremente.
–       La confianza, para poder afrontar retos y atreverse a salir de la zona de confort.
–       La seguridad, para afrontar el proceso de forma progresiva y ordenada paso a paso, de manera que los pequeños cambios vayan produciendo resultados cada vez mayores.
–       El respeto, de manera que el coachee no se sienta juzgado.
Para llegar a conseguir que el proceso de coaching se lleve a cabo hay que analizar las siguientes cuestiones:
–       Objetivo: definir claramente lo que se pretende cambiar, mejorar, aprender, etc.
–       Recursos: identificar las fortalezas y debilidades, es decir ser conciente de qué capacidades, cualidades, dones, habilidades se pueden utilizar para el proceso de cambio y cuales se pueden mejorar para que se conviertan en limitaciones.
–       Realidad: partir de la situación real empleando datos objetivos, identificando las creencias limitantes que podrían obstaculizar el proceso, los valores y la motivación.
–       Opciones: ser capaz de generar alternativas creativas e ideas nuevas y determinar cuál es la mejor para el coachee.
–       Acción: emprender un plan de acción una vez analizadas las opciones y comprometerse a llevarlo a cabo estableciendo los pasos necesarios.
–       Evaluación: comprobar lo hecho, rendir cuentas estableciendo fechas y celebrar los éxitos.
El coaching está basado en los siguientes fundamentos:
–       Flexibilidad ante los cambios que requieren una nueva forma de pensar y actuar y una gran capacidad de adaptación.
–       Aprendizaje de procedimientos y conceptos diferentes a los ya conocidos para ampliar la capacidad de acción efectiva.
–       Constancia ante el compromiso de acción para mantener el esfuerzo requerido durante el tiempo necesario identificando hábitos que no funcionan y emprendiendo otros diferentes.
–       Responsabilidad para ser capaz de responder ante las diferentes situaciones vitales.
–       Toma de conciencia para trabajar la atención concentrada. Según Whitmore (2003) “tomar conciencia consiste en adquirir conocimiento a través de la reflexión, la observación e interpretación de lo que uno ve, oye y en general siente. Cuando esto ocurre se tiene una percepción más clara de lo normal. Se ve lo importante, lo relevante y se reconoce cuando las emociones distorsionan la percepción. La destreza del coach debe conseguir elevar la conciencia al menos hasta que desarrollemos la habilidad para entrenarnos a nosotros mismos, lo cual abrirá la puerta al descubrimiento y mejoramiento continuo de nuestra persona. Ser conciente es saber lo que ocurrre alrededor y lo que sientes. Una de las tareas más importantes del coach es elevar el nivel de conciencia propio y del coachee porque en la mayoria de los casos el mecanismo que activa la conciencia sólo se emplea para sobrevivir y salir del paso”.
Según Whitmore (2003) lo beneficios del coaching son los siguientes:
–      Mejora el desempeño y la productividad.
–     Aprendizaje mejorado.
–      Fomento del desarrollo personal.
–      Mejora de las relaciones y la calidad de vida.
–      Más tiempo para uno mismo.
–       Más ideas creativas.
–       Mejor empleo de recursos y habilidades.
–       Obtención de respuestas rápidas y eficaces.
–       Desarrollo de la iniciativa.
–       Mayor adatabilidad al cambio en general y al cultural.
–       Mayor motivación.
–       Mejores habilidades vitales.
 
BIBLIOGRAFÍA
– Gallwey, T., 2012, El juego interior del trabajo, Málaga, Sirio.
– Miedaner, T., 2002, Coaching para el éxito, Barcelona, Urano.
– Scheele, S., 2012, Universidad Politécnica de Madrid, Aula de competencias emocionales y relacionales, http://www.youtube.com/watch?v=yy3YvUgA-Nc
– Whitmore, J., 2003, Coaching, el método para mejorar el rendimiento de las personas, Barcelona, Paidós, http://es.scribd.com/doc/104644342/Whitmore-John-Coaching-PDF